Santo Domingo.- Cuando Manfred Codik, comisionado Hípico de la República Dominicana, se hizo cargo del Hipódromo V Centenario en el 2013, el lugar tenía siete meses cerrado, los caballos deambulaban por las pistas de competencias y no se practicaba el deporte que él ama desde su niñez.
Tres años después, la población caballar es de 318 ejemplares y solo en el 2016 el Hipódromo generó ingresos por RD$387,770,476.
El vínculo con los caballos de Codik tomó fuerza cuando tenía 16 años; “le dieron una pela” porque con el dinero que se había ganado compró dos caballos por RD$100 en 1963, a crédito. En esa época ganaba RD$8 mensuales.
En 2004 se retiró de los negocios porque los problemas en su corazón no le permitían continuar. Y se siguió dedicando a los caballos. Fue presidente y fundador de la Asociación de Criadores.
Estuvo toda su vida en la directiva de la Asociación de Dueños de Caballos y fue vicepresidente de la Confederación Hípica Internacional.
Cuando se hizo cargo del Hipódromo V Centenario todos los servicios del centro estaban cortados. Los dueños de caballos tenían 15 semanas sin cobrar y los empleados cinco meses.